Colosio: “Alcalde Peregrino»

Cuántas millas ha acumulado Luis Donaldo Colosio Riojas desde que asumió el cargo como presidente Municipal de Monterrey, cargo que ha manejado más a control remoto que de manera presencial…

Solamente su tarjeta de crédito y la agencia de viajes que le administre los boletos de avión lo saben…

Y no más porque su nombre sonó varias veces por el altavoz de la Terminal C del Aeropuerto Internacional de Monterrey, léase, terminal de Viva Aerobus, fue que se le cayó el teatrito al alcadito regio, Luis Donaldo Colosio, quien pretendía salir de incógnito en un vuelo supuestamente con destino a Nueva York, aunque luego le compusieron y resultó ser Chicago.

Como Luis Donaldo “nunca sale sin su duvalín”, se fue acompañado del aún diputado federal Agustín Basave, quien por sus tanates no ha tomado posesión de la Secretaría del Ayuntamiento regio.

Y así, en lo oscurito, y en horario obviamente laboral, los dos personajes se salieron con la suya y se fueron de weekend a Gringolandia, y Monterrey, la ciudad, pues que se las arregle sola.

Claro que en el periódico oficial de ayer (léase El Norte) se publicó una fotonota exculpando al munícipe: “El Alcalde Luis Donaldo Colosio, sostuvo ayer reuniones con paisanos en Chicago, a donde viajó con el Diputado federal Agustín Basave, sin dar más detalles sobre el encuentro” se lee en el lacónico boletín.

Y me pregunto: ¿Colosio es titular de derechos humanos, de migración, de gobernación o de cosa similar que atienda a los migrantes? Claramente esa no es su chamba y se ve que fue un evento que se sacaron de la manga.

Lo cierto es que el trabajo de Colosio ha sido tan gris al frente de la comunica regia, que de no haber sido por ese llamado en el megáfono a las 10:45 am en la Terminal C del aeropuerto, francamente ni cuenta nos hubiéramos dado de su ausencia.

La ciudad, como dije, está deteriorada, descolorida, devaluada, abandonada e insegura por el hombre que cobra al mes por encabezar a los regios y ajustar el timón, pero que, como ya lo hemos visto, se la ha pasado de gira en gira y de fiesta en fiesta.

Y ahí viene el Carnaval, por lo que le apuesto a que Luis Donaldo ya tiene sus planes para viajar de jodido a Mardi Gras en Nueva Orleans… Aunque para ver espectáculos de ese tipo, cuestión de que se asome una noche a Calzada Madero.

¿No habrá algún regidor o diputado con los pantalones bien puestos primero para exigirle al alcalde cuentas por este viaje? Y ¿No habrá algún diputado o regidor que promueva un reforma de la ley para que se obligue a los alcaldes a pedir permiso al Ayuntamiento para ausentarse de la chamba y salir del país?

Ahora que le apuesto dobles contra sencillos que los viajes del alcalducho no aguantan una auditoría… Porque los pagamos usted y yo, empezando por eso.

Porque al paso que vamos Luis Donaldo se ganará el mote de “El alcalde Peregrino”, con todo y lo que ese sobrenombre implique.