Guardería ABC: otro año de lucha, solidaridad y dolor

A 14 años de la tragedia de la Guardería ABC de Hermosillo, Sonora, que dejó un saldo de 49 niños muertos y un centenar de heridos, víctimas de la desgracia ahora convertidos en jóvenes marcharon para recordar a sus compañeros y exigir justicia que, dicen, no llega.

HERMOSILLO (apro).- Este 5 de junio el clima fue distinto. A diferencia de otros años la soledad de las calles y el silencio de un contingente que de tiempo en tiempo gritaba “¡justicia!”, se encontraba bajo una temperatura benevolente, como si quisiera abrazar al grupo de ciudadanos, cada vez más reducido, conmemorando la lucha por dar con los responsables del incendio en la Guardería ABC en 2009.

Aún cuando pareciera que el reclamo social por darle paz a 49 familias que perdieron a un ser querido se apaga, surgen entre el contingente los jóvenes sobrevivientes del incendio de la Guardería ABC, quienes exigen justicia, por ellos y, sobre todo, por quienes ya no se encuentran más con sus padres.

Carlos Santiago Corona Carranza, tiene 13 años de edad y tras el lamentable hecho tiene lesiones en sus pulmones, así como una lesión permanente en su pierna derecha. Estos padecimientos lo hacen que camine con más ahínco para exigir justicia.

“Se me hace inaceptable que hayan transcurrido catorce años y no hemos tenido justicia de ninguna forma, pero seguiremos luchando para que encuentren a los culpables de lo ocurrido”, dijo. 

Santiago al igual que 100 jóvenes de entre 13 a 15 años forma parte de los sobrevivientes, quienes tienen secuelas y todavía se mantienen enfocados en tratarse con el fin de tener mejor calidad de vida.

Dana Camila Espinoza Ortíz, tiene 15 años y aún se enfrenta a afectaciones como asma, sinusitis, bronquitis, rinitis, entre otros y para ella los 5 de junio representan lucha, solidaridad y dolor.

“Pero más que nada es dolor porque es algo que todos recuerdan este día, pero nosotros lo vivimos todo el año, nosotros estamos constantemente atendiéndonos y sufriendo las consecuencias de los actos de personas corruptas”, dijo beligerante.

Dijo que los jóvenes sobrevivientes luchan por los compañeros que ya no están y también por ellos mismos, porque es algo que no se debe de olvidar.

“Porque el que olvida se condena a repetir la historia y nosotros luchamos por eso; agradezco a la gente que se unió y se solidarizó con la causa”, dijo.

Desde el último año antes de pandemia, el grupo de adolescentes se hizo visible y tomó el estandarte de la causa para reclamar al estado, a la federación y a las instituciones en materia de procuración de justicia, la cuenta pendiente que tienen con ellos.

Este año, marcharon poco más de mil personas desde la Guardería ABC para detenerse en la iglesia San José, donde se dieron las simbólicas 49 campanadas para soltar globos en conmemoración de los pequeños que perdieron la vida en el incendio ocurrido el pasado 5 de junio del 2009.

Posteriormente, el contingente se dirigió a la Fiscalía General de Justicia del estado de Sonora, para referir la tarea pendiente que tienen con las víctimas, sobrevivientes y sociedad civil inconforme, para luego terminar con un pase de lista en el museo de la Universidad de Sonora, en el que detrás de cada nombre, la población gritaba “¡No debió morir!”.

Proceso