Vicepresidenta de Colombia dice que con AMLO bajó la cooperación binacional antidrogas

Marta Lucía Ramírez planteó la necesidad de que México intensifique su cooperación antidrogas debido a la gran amenaza que representa el fenómeno del narcotráfico para los dos países y a que reportes recientes indican que la colaboración binacional en ese ámbito es “bajita”.

BOGOTÁ (apro).- La vicepresidenta y ministra de Relaciones Exteriores de Colombia, Marta Lucía Ramírez, dijo este miércoles que durante el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador “ha bajado” la cooperación de México en la lucha binacional contra el narcotráfico.

En declaraciones a Apro, la vicepresidenta colombiana aseguró que esto ha ocurrido “a pesar de las evidencias que tenemos de que los cárteles mexicanos en Colombia tienen una presencia cada vez mayor”.

Ramírez planteó la necesidad de que México intensifique su cooperación antidrogas debido a la gran amenaza que representa el fenómeno del narcotráfico para los dos países y a que reportes recientes indican que la colaboración binacional en ese ámbito es “bajita”.

“Quisiéramos una mayor intensidad en la cooperación en la lucha contra el narcotráfico”, afirmó.

La vicepresidenta, quien también ocupa el cargo de canciller, señaló que sí hay comunicación entre las Fuerzas Militares y las policías de Colombia y México “pero no en la intensidad que se requiere”.

Para corroborar sus afirmaciones, Ramírez le llamó desde su celular al ministro colombiano de Defensa, Diego Molano, quien dijo por el altavoz: “Lo que tenemos claro es que los cárteles mexicanos vienen a la costa pacífica colombiana a negociar las drogas con grupos como las disidencias de las FARC y el ELN (la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional) y, en el caso de Urabá (región del noroccidente colombiano) con el Clan del Golfo”, el mayor grupo armado ilegal de este país.

La cooperación de México, señaló el ministro, “se ha mantenido, no se ha incrementado ni se ha hecho ningún esfuerzo excepcional adicional” a pesar de que los cárteles mexicanos de la droga, en especial el de Sinaloa y el de Jalisco Nueva Generación, multiplican sus actividades ilegales en Colombia. 

La vicepresidenta Ramírez sostuvo que las Fuerzas Militares, la policía y el ministerio de Defensa de Colombia “siempre tiene la disposición de incrementar al máximo la cooperación porque sabemos que es una amenaza común la acción de los cárteles mexicanos y colombianos”.

Las declaraciones de la vicepresidenta de Colombia se produjeron luego de que ella sostuvo un encuentro con corresponsales de medios extranjeros en la sede de la cancillería, en el que dijo que a pesar de que Colombia ya hizo un pronunciamiento oficial contra la “intervención” de López Obrador en las elecciones presidenciales colombianas, este sigue inmiscuyéndose en la contienda.

Ramírez dijo que el pasado martes habló del tema con el embajador de México en Colombia, Alejandro García Moreno, porque le parece “inusual y muy poco respetuoso con la democracia colombiana” que el presidente López Obrador haga declaraciones a favor de una candidatura.

En la conferencia de prensa mañanera del pasado 3 junio, López Obrador envió un abrazo al candidato presidencial izquierdista Gustavo Petro y dijo que este enfrenta “una guerra sucia de lo más indigno y cobarde, todo lo que ya vimos y padecimos en México: ‘Petro, un peligro para Colombia, comunista, guerrillero; Colombia va a ser como Venezuela’, etcétera”.

La cancillería colombiana expresó ese mismo día su inconformidad por esas declaraciones, sostuvo que “constituyen una injerencia desobligante en los asuntos internos” del país y solicitó al mandatario mexicano “respetar la autonomía del pueblo colombiano para escoger a su próximo presidente sin injerencias que traten de influir en los electores”.

El pasado lunes, el presidente mexicano se volvió a referir a las elecciones colombianas, que se realizarán el próximo domingo y en la cuales se enfrentarán Petro y el empresario Rodolfo Hernández, y pidió a los votantes colombianos que “elijan bien” y que piensen “en un cambio, una transformación”.

Ramírez también reprochó las declaraciones del presidente chileno Gabriel Boric a favor de Petro, a quien se habría referido cuando dijo la semana pasada: “Ustedes saben dónde está mi corazón”.

“Entre menos injerencia externa haya, mejor para esta democracia”, dijo la canciller.

Se le preguntó si eso incluía también a la congresista republicana de Estados Unidos, María Elvira Salazar, quien el mes pasado dijo que Petro “es ladrón, marxista y terrorista, y quiere ser el próximo presidente de Colombia, para llevar a los colombianos a la miseria, el hambre y el exilio”.

La canciller colombiana sostuvo que ningún funcionario extranjero debe intervenir en la política colombiana.

“Esto no se trata de que unos sí y otros no”, aseguró, aunque dijo que llama más la atención cuando son presidentes en ejercicio los que hacen declaraciones injerencistas.

Proceso